El Hada de la Claridad está cómodamente sentada; se ha tomado un momento para tranquilizarse y poner en orden sus ideas. Su espíritu se ha elevado al santuario de quietud, desprovisto de toda confusión externa. Se concentra en una dirección, empapándose del sosiego del jardín al tiempo que redescubre un estado de claridad mental. Los tonos amarillentos de su vestido y de sus alas representan la energía intelectual, y la flor naranja, la vitalidad interior y la resistencia de la mente.