El Hada de la Serenidad se detiene extasiada por la tranquilidad. Pacífica, calmada y discreta, es la voz armonizada del azul que la rodea, un color acorde con su espíritu. Escucha el piar de los pájaros, y el susurrar de los árboles suma su melodía a ese momento sosegado de soledad. Las setas a sus pies la miran entornando los ojos con un suspiro, compartiendo su serenidad mientras gozan de la sombra en un largo día de verano. Los pensamientos vienen y van mientras ella sueña despierta.
Sus mejores planes y direcciones llegan siempre cuando el conocimiento auténtico, la visión multifacética y copiosas cantidades de serenidad se unen, formando una mezcla en la toma de decisiones. Quiere que siempre recuerdes que un descanso diario en tu propio jardín de serenidad te ayudará espectacularmente a mantener tu cuerpo, tu mente y tu espíritu en la más bella armonía de tres elementos.